Canalización de la Madre Tierra
Sobre la dualidad
Canalizado por Irma Fernández
15 diciembre 2018
Soy yo, la Madre Tierra quien habla. Sé que algunos días te resulta difícil sentirte a gusto aquí, sentir la alegría de estar vivo.
Puede que hoy sea uno de esos días, que la vida te esté poniendo a prueba en estos momentos, que te estés enfrentando a un gran reto, y tengo algo que decirte.
No importa, de verdad. No tiene ninguna importancia, porque saldrás de esta como siempre lo has hecho; y lo harás fortalecido.
Volverás a sonreír y a tener esperanza. Volverás a encontrar el camino. Volverás a amar y a ser amado. Porque eres luz y amor, y no puedes no manifestarlo por mucho tiempo.
Precisamente por la luz que hay en ti, se presentan desafíos en tu vida. No lo tomes a lo personal querido, son solo aprendizajes que tu alma anhelaba conocer.
Deja de dolerte y observa cada situación difícil como un reto, una oportunidad para superarte a ti misma, convertirte en un héroe o heroína, sacar la fuerza luminosa que ya tienes y no conoces, y convertirte en alguien todavía más increíble.
No importa que hoy quieras tirar la toalla: en la vida hay días de todos los colores.
Esto es estar en la Tierra, y si aún sigues aquí a pesar de todo, todavía tienes algo importante que hacer, alguien increíble a quién conocer, o algo maravilloso que enseñar al mundo.
Eres humano y divino, cada cosa en esta dimensión tiene dos caras, en eso consiste la dualidad.
Todo puede ser “bueno” o “malo” según su medida y su momento. El Sol ilumina y calienta, pero también puede quemar; la lluvia alimenta las cosechas, pero también puede inundar; la nieve es hermosa, pero puede paralizar el mundo.
¿No ves que todo es dual? Todo es perfecto y nada lo es, no te lo exijas a ti mismo y no lo esperes de la vida. Sé consciente de que habrá momentos hermosos y momentos difíciles que te desafiarán, e intenta ser feliz en ambos. Intenta aprovechar todo lo que se presenta en tu vida a tu favor.
El sabio sabe ser feliz en medio de la tormenta, porque sabe que pasará. Recuerda que hasta en el centro de los tornados existe un punto de perfecta quietud donde estar a salvo.
Es hora de integrar la luz con la sombra y disfrutar la vida por igual, en todos sus colores.
Del Libro "Más allá de la Tierra", texto canalizado por Irma Marset Fernández
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